Las combinaciones de mermeladas caseras son prácticamente infinitas, yo hoy os traigo de las que más me gustan a mí: fresa y vainilla ¿Aprovechamos las últimas fresas de la temporada con una mermelada? ¡Si nunca habéis hecho mermelada casera, os recomiendo que le perdáis el miedo ya!
Ante todo, me tengo que disculpar por estos largos periodos sin publicar en el blog, ¡pero es que últimamente he estado súper liada! Al final me las he arreglado para aprovechar mis momentos de soledad entre tanto viaje de empresa para sacar un ratillo y picar teclas. Este post y la receta los tenía preparados desde hace ya bastante, pero no he encontrado el momento de publicarlo. Sólo espero que ya no sea demasiado tarde y todavía encontréis algunas fresitas baratas en el mercado.
Además de daros la receta de esta riquísima mermelada, quería compartir con vosotros en esta entrada la experiencia de recolectar mis propias fresas en uno de los muchos campos de fresas de Múnich. Básicamente, hay una empresa que ofrece acceso a sus campos de fresas (también de frambuesas, grosellas, arándanos…) para que la gente recolecte la fruta que quiera y al salir te la cobran a peso. Puedes llevar tu propia cestita o recipientes para llenar de fresas y si no llevas ellos te venden los suyos allí.
Una idea bastante buena la verdad, a mi sinceramente me encantó la experiencia, ¡aunque acabé con agujetas!! Me lo pasé como una enana, me llevé 3 kilos y medio de fresas, y del sabor qué os puedo decir, creo que no hace falta ser muy listo para imaginarse que no se parecen en nada a las que se compran en el súper. Los campos suelen estar llenos de familias, a los niños les encanta ir.
Y mientras vas llenando tu cestita, de vez en cuando alguna que otra fresa va a parar a la boca (considérese control de calidad 😉 ) Si queréis saber un poquito más, en este post, Cogiendo fresas en Munich, Caru lo explica mucho mejor que yo y con unas fotos muy bonitas.
Así que, si alguna vez estáis de visita en Múnich durante la temporada de fresas, ya tenéis una idea de actividad alternativa y bonita para hacer aquí. Y quién sabe, igual en España a alguien se le ocurre pronto montar el mismo tipo de campos. Mientras tanto, con fresas de súper o de donde sean, ¡vamos a preparar esta exquisita mermelada!
Corta las fresas en trozos pequeños, viértelas en una olla grande y mézclalas con el azúcar y el zumo de limón. Deja macerar la mezcla tapada durante una hora. Si te gusta encontrar trozos de fruta en la mermelada la puedes dejar así, si la prefieres más fina tritúrala con la batidora. Mientras macera puedes aprovechar para esterilizar los tarros que vayas a usar, simplemente ponlos a hervir cubiertos de agua durante 1 minuto. Añade la vainilla y pon a cocer a fuego medio. Deja que la mezcla hierva a fuego alto durante al menos 10 minutos. Si el azúcar que usáis es especial para mermeladas el tiempo de cocción será menor, en todo caso seguid las instrucciones del paquete. Para comprobar si la mermelada está hecha, vierte una cucharada sobre un plato, inclina el plato y si la mermelada cae rápidamente aún no está lista. Si se desliza lentamente adhiriéndose al plato ya está lista para retirar del fuego. Llena los tarros con la mermelada aún caliente y tápalos inmediatamente. Gira los tarros y déjalos reposar sobre las tapas hasta que se enfríen. De esta manera se creará el vacío y la mermelada aguantará más tiempo.Mermelada de Fresa y Vainilla
Ingredients
Instructions
Notes
Dulces sueños,
1 Comment
Caru
septiembre 21, 2016 at 10:21 amHola. Gracias por la mención. No conocía tu blog, pero me encantan las recetas y sobre todo tus fotos.
Un abrazo,
Caru.