
Este es sin duda el mejor pastel de chocolate que he comido, ¡y resulta que es vegano! Pero no dejes que eso te aleje de hacerlo si no sigues una dieta vegana, especialmente si estás buscando una receta de pastel de chocolate rico y jugoso. La textura es súper suave y decadente con un glaseado de chocolate suave y sedoso. La crema es simplemente perfecta. Es cremosa, sedosa, rica, achocolatada y se extiende como un sueño. Para alcanzar esa textura tan increíble, he usado margarina, y os digo desde ya que me gustan mucho más que los buttercream con mantequilla.


¿Qué hace que este pastel de chocolate sea tan rico? ¿Por dónde empiezo? El bizcocho tiene una textura húmeda y fudgy, como dicen los ingleses que está fuera de serie!. Pero sigue siendo esponjoso como debería ser cualquier bizcocho. Tiene un sabor muy intenso a chocolate, tanto en el pastel como en la crema, que ahora es mi nueva receta de crema de chocolate favorita. Es cremosa, suave y se derrite en la boca.

Este pastel también permanece jugoso durante días. Puedes comer un trozo 5 días después y todavía sabe tan bien como el primer día. Y sobre todo, esta receta es muy fácil de hacer y no hace falta que el glaseado del pastel quede perfecto. Con una espátula lo puedes decorar haciendo aguas y quedaría precioso. Así que lo hace una tarta perfecta para celebrar un cumpleaños por ejemplo, incluso para los que no son unos genios de la repostería.

Me gustaría dejar constancia de que la mayoría de los bizcochos veganos son mucho más jugosos y deliciosos que los bizcochos normales. ¿Por qué? Debido a que la mayoría de los bizcochos veganos tienen una base de aceite, crean una textura mucho más suave y rica que mantiene el pastel húmedo por mucho más tiempo.

Aquí hay otras dos razones por las que este pastel es tan húmedo y delicioso; El buttermilk vegano. El secreto para obtener un pastel vegano jugoso pero tierno es hacer tu propio buttermilk vegetal. Para esta receta, combina tu elección una leche vegetal con un poquito de vinagre. La mezcla comenzará a cuajar después de unos minutos, al igual que el buttermilk normal. Esto ayuda a aportar más acidez al pastel que, en combinación con el bicarbonato de sodio, crea una textura realmente tierna.
La compota de manzana sin azúcar sería el otro gran secreto de la jugosidad de este bizcocho. Actúa como el reemplazo del huevo, pero proporciona mucha más humedad que los huevos. La compota de manzana es un excelente sustituto de los huevos porque ayuda a unir la masa del bizcocho. Pero es importante asegurarse de añadir levadura (polvo de hornear) a la masa para ayudar a leudar el pastel, de lo contrario, la compota de manzana puede apelmazarlo y crear un pastel denso y pesado.

Yo esta tarta la hice para el cumpleaños de una chica vegana, sino hubiera sido por eso, nunca me habría aventurado a hacer una tarta de cumpleaños vegana y no habría descubierto esta maravilla de receta. Por eso motivo no os enseño el corte de la tarta grande, es una tarta de 3 pisos de unos 20 cm de diámetro. Hice la versión mini para poder enseñaros el corte de los bizcochos, espero que os podáis imaginar qué corte tan bonito tendría la versión grande.

Para hacer layer cakes, siempre uso moldes individuales de aluminio como estos porque son los que me dan mejor resultado. Para esta receta he usado 3 moldes como estos:
Juego de latas redondas para tartas, aluminio, 20,3 cm
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Dulces sueños,

Layer cake de chocolate vegano
Esta es la única receta de pastel de chocolate que necesitarás, ¡sea vegana o no! Está increíblemente húmedo y cubierto con una crema de chocolate cremosa y deliciosa.
Ingredients
- PARA LOS BIZCOCHOS:
- 360 g de leche vegetal (yo he usado de almendra)
- 1 cucharada de vinagre de manzana o vinagre de vino blanco
- 400 g de harina
- 80 g de cacao puro en polvo, sin azúcar
- 2 cucharaditas de levadura en polvo química (polvo de hornear)
- 1 1/2 cucharaditas de bicarbonato sódico
- 3/4 de cucharadita de sal
- 485 g de azúcar
- 255 g de compota de manzana (sin azúcar añadido)
- 200 g de aceite vegetal suave
- 1 cucharada de esencia de vainilla
- 220 ml de agua caliente
- 1 1/2 cucharaditas de café soluble instantáneo (Nescafé)
- PARA LA CREMA:
- 410 g de margarina, a temperatura ambiente
- 360 g de azúcar glas
- 60 g de cacao puro en polvo, sin azúcar
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
Instructions
Precalienta el horno a 170ºC y engrasa 3 moldes para bizcocho de unos 20 cm de diámetro.
Mezcla la leche y el vinagre y reserva para de corte. Con esto estamos haciendo un buttermilk vegano.
Tamiza la harina, el cacao en polvo, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio y la sal en un bol mediano y reserva.
En un bol grande, ya sea batiendo a mano o con una batidora eléctrica, mezcla el azúcar, la compota de manzana, el aceite y la vainilla.
En u vaso, mezcle el agua caliente y el café soluble.
Agrega a la mezcla de azúcar, alternando la leche y los ingredientes secos, comenzando y terminando con los ingredientes secos.Una vez que la masa está homogénea, agrega el vaso de café y mezcla hasta que se integre.
Vierte la masa en los moldes de manera equitativa y hornea durante unos 30-35 minutos, o hasta que un palillo en el centro salga limpio.
Deja enfriar los bizcochos durante unos 20 minutos sobre una rejilla. Luego desmóldalos y déjelos enfriar completamente a temperatura ambiente antes de montar la tarta.
Para preparar la crema, con una batidora eléctrica, bate la margarina hasta que quede cremosa. Incorpora el azúcar glas, primero una mitad y luego la otra, batiendo a velocidad media alta hasta que se haya combinado, por lo menos unos 2 minutos después de cada adición de azúcar.
Agrega el cacao en polvo tamizado y la esencia de vainilla. Bate la crema durante unos 2 minutos más.
Si el buttercream te ha quedado demasiado líquido, agrega unos 100 g extra de azúcar glas hasta que alcance la consistencia deseada. Si está demasiado denso, agrega 1-2 cucharadas de leche vegetal y bate hasta obtener la consistencia deseada.
Para montar la tarta, unta aproximadamente 1 taza de glaseado entre cada capa de bizcocho.
Una vez que todas las capas estén apiladas, coloca el pastel la nevera unos 20 minutos para que se asiente.
Una vez firme, retire la tarta de la nevera y cúbrelo por fuera con el resto de la crema.
Si quieres hacer la decoración con manga pastelera como la que yo he hecho, puedes reservar un poco de crema y rellenar una manga pastelera con la boquilla en forma de estrella para crear esas rosas de buttercream.

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