Si no habéis probado nunca un dulce con sabor a violeta, os estáis perdiendo un gran descubrimiento. El aroma en boca que se siente al comer una de estas preciosas flores es muy difícil de describir y de comparar con cualquier otra cosa. Así que os animo a comprar un extracto de violeta y usarlo para que sepáis de qué os hablo. La delicadeza de este bizcocho de claras de huevo con la ligereza de la nata y el aroma de las violetas es nada más y nada menos que un bocadito para ángeles!
Este año el tiempo está alborotado pero la primavera sigue su curso y aquí en Baviera hace
días que empezó la explosión de color típica cuando todo árbol y planta brota de golpe. Como
esta época del año me encanta quería hacer una tarta que representara ese efecto y cómo no,
con mi color favorito: el lila!
Pero como sería un poco raro utilizar los colores apagados del final del invierno, decidí utilizar
como base el blanco, para resaltar más el efecto. Para el color he utilizado flores de violetas
silvestres (ojalá os pudiera indicar dónde conseguirlas, tendréis que salir a la búsqueda ) que
salen como setas por los campos y márgenes de caminios al lado de mi casa! Y el efecto final es
genial, asemejándose además a una colonia de mariposas al vuelo, es primavera!
Para la masa por supuesto había que darle color, y siguiendo con la paleta de colores podía ser
otro que el de las flores y similares. Con un poco de colorante y jugando con el relleno ha
quedado genial, aunque los colores no sean apetitosos para todo el mundo, lo sé, pero os
prometo que el sabor es inigualable!
Os dejo un enlace donde poder comprar la esencia de violeta que se que no es fácil de conseguir. Yo también la compro online en Amazon, pero si vivís en la ciudad igual tenéis alguna tienda especializada en repostería donde poder comprarla.
Aroma alimentario natural en polvo 15 g – Violeta
Dulces sueños,
Angel food cake de violetas
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- 9 claras de huevo
- 1 cucharadita de cremor tártaro
- ¼ de cucharadita de sal
- 200 g de azúcar
- 2 cucharaditas de aroma o extracto de violeta
- 100 g de harina
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 400 ml de nata líquida para montar (muy fría)
- 40 g de azúcar glas
- colorante en pasta alimenticio morado (opcional)
- Unas cuantas violetas silvestres limpias y secas
Instructions
Precalienta el horno a 175ºC.
Bate las claras con la sal a velocidad media hasta que queden espumosas, no a punto de nieve. Cuando empiecen a espumear, añade el azúcar cucharada a cucharada y sigue batiendo hasta que quede un merengue brillante. Añade el extracto de violeta y bate a velocidad media un poco más. En mi caso el color se lo ha dado el extracto, si lo deseas puedes añadir colorante alimenticio.
Tamiza la harina con la levadura y añádela a la mezcla de las claras en dos partes, incorpórala de manera suave a mano y con movimientos envolventes.
Vierte la mezcla en el molde especial para Angel Food Cake (sobre todo que no esté engrasado). Hornea durante unos 45 minutos o hasta que la superficie esté dorada. Retira del horno y dale la vuelta al molde para que se enfríe sobre las patas. Deja enfriar completamente antes de manipular.
Monta la nata con el azúcar glas. Reserva una parta de la nata para el relleno, este paso es opcional, yo lo he hecho para darle un tono de color diferente al interior, pero si quieres puedes cubrir todo el bizcocho con la nata y listo.
Añade colorante a la nata que has reservado y una cucharadita de extracto de violeta. Corta el bizcocho en dos mitades y rellena con la nata morada. Cubre el bizcocho con el resto de nata y decora con las violetas silvestres.
Notes
Cuando vayas a usar flores para decorar tartas, asegúrate de que las lavas muy bien y recorta tanta parte del tallo com puedas para que te queden solo los pétalos, ya que no es agradable comer los tallos. Si no encuentras violetas silvestres donde vives, puedes decorarlo con violas o con pensamientos de cultivo que son de la misma familia y son comestibles.
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