Más fácil que estas mini Charlottes no vais a encontrar otras. 4 ingredientes, repito: sólo 4 ingredientes, sin horno y usando dos tipos de galleta que podéis comprar ya hechas. ¡Tenéis el postre del domingo preparado en 10 minutos!!
Esta semana he estado en París por trabajo, y no sé, sabéis eso de que al volver del viaje me apetecía un dulce así bien fino y francesito. Serán los aires parisinos que la vuelven a una más refinada J Mi primera opción habría sido hacer Macarons, pero como soy un desastre y me salen a veces si a veces no, los tengo en mi lista negra temporalmente y no me apetece sacarlos de ahí de momento.
Tampoco tenía mucho tiempo ni ganas de complicarme la vida, así que pensé Charlottes, que por otra parte sabéis que me tienen obsesionada porque son preciosas. Y como hay de muchos tipos diferentes me decidí por la frambuesa porque mi planta del balcón aún tiene unas cuantas, me ha brotado de nuevo al final del verano y aún tengo frambuesas frescas, ¡increíble!
Y entonces se apoderó de mi la pereza y la falta de ingredientes más pocas ganas de ir al súper. Así que ideé una manera fácil y rápida de hacer charlottes. De aquí han salido las mini charlottes, para no tener que hornear una base de bizcocho pensé que unas galletas redondas tipo María podían hacer de base.
Y para el cerco he usado unos bizcochos que en Cataluña llamamos “melindros” que compré cuando estuve este verano en Barcelona. Vienen a ser como los bizcochos “lady fingers” pero son blanditos, por lo que se asemejan más a los bizcochos que los franceses usan para las Charlottes. Y como en Munich no los encuentro (ni tampoco galletas María) pues siempre que voy a casa vuelvo con el maletero lleno. Un día me detienen en la frontera por contrabando de galletas.
Eh voila! Para disfrutar de estas preciosas y ricas mini Charlottes, sólo hay que preparar el relleno, dejarlas enfriar en la nevera y ya lo tenéis.
Pon la gelatina en remojo en agua fría para que se ablande. Mezcla 250 g de las frambuesas con el azúcar y tritúralas con la batidora. Pasa la pasta por un colador para quitar todas las pepitas y que quede más fina. (No tires la pasta con las pepitas, mira las notas) Monta la nata y añádele el puré de frambuesas. Mezcla en movimientos envolventes hasta que se incorpore. Escurre la gelatina y ponla en un bol pequeño a calentar en el microondas durante 30 segundos para que se derrita. Vierte la gelatina fundida en la crema de frambuesa y mezcla un poco, siempre en movimientos envolventes. Enfría la crema en la nevera unos 15 minutos. La crema tiene que tener cuerpo antes de verterla en los moldes, si está demasiado líquida se colará entre los bizcochos y se liará parda. Para montar las mini charlottes necesitas 4 anillos metálicos de unos 8 o 10 cm de diámetro. Si no los tienes, puedes intentar fabricarte unos con plástico, por ejemplo, depende de lo manitas que seas te quedará bien igual. Pon primero una galleta en la base y cierra un cerco alrededor con los bizcochos. Rellena con crema de frambuesa hasta la mitad más o menos. Coloca otra galleta y pon algunas frambuesas frescas. Cubre con más crema hasta que le falte un dedo para llegar al tope. Enfría en la nevera al menos 2 horas. Decora con algunas frambuesas frescas cubriendo la superficie y listo. lo dicho, con el resto de pulpa y pepitas de colar el puré de frambuesas puedas hacer alguna bebida. Por ejemplo, agua con sabor a frambuesa, sólo mezcla en un recipiente los restos de puré y el agua y vuelve a colar. O algún cóctel, sólo tienes que seguir el mismo método, disolver los restos del puré y volver a colar para quitar sólo las semillas.Mini Charlottes de Frambuesa
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Dulces sueños,
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